"El hombre es el muro de carne que separa el cielo del infierno", afirma uno de los personajes de Ángel Ruiz Cediel. Y es cierto, siendo tanto más así en esta novela que se ha convertido en uno de los grandes clásicos de la literatura contemporánea española, acogida con entusiasmo por los más de 30.000 lectores que han agotado ya 23 ediciones.

Una historia de amor en el infierno. ¿Que parte de la naturaleza de los hombres les empuja a unos a lo más sublime y a otros a lo más abyecto? ¿Somos solo carne, o acaso somos más que eso?

Una historia de ternura en la posguerra; una historia de belleza en la desolación; y una historia de amor entre las ruinas de las almas destruidas por la violencia y el rencor.

Un retrato ágil e intenso de las grandezas y miserias del siglo XVI español, tal vez el más trascendente de la historia contemporánea de la humanidad. Un recorrido fiel por el real suceso de la Conquista, las herejías de su tiempo y las guerras europeas que se fusiona con una bella historia de amor donde la ternura, la épica y el lirismo, hilvanan esta aventura literaria que pondrá de relieve los grandes valores humanos.

Una visión enteramente original sobre el fratricidio español: la perspectiva de los inocentes, los que sufren ajenos a los bandos. La pureza, la candidez y la inocencia de este libro, marcan un auténtico ejercicio de autocrítica, muchas veces ajeno al gen español.

Por alguna extraña razón, los seres humanos ya no pueden reproducirse y, en un lugar próximo a Madrid, aparece un misterioso personaje; Gilgamesh. El autor de esta precursora ficción ejecuta de forma superlativa la deconstrucción de la sociedad a medida que esta va desapareciendo. Con un argumento no violento, pero no por ello menos poderoso, la potente historia de «Crepuscular» se meterá en la piel de los lectores, dejando una huella imborrable.